La realidad cambió en Venezuela. No solo por el hecho de que su líder falleció -y que fue sustituido por Nicolás Maduro- sino porque, además, ya no se caracteriza por la cantidad de inmigrantes en sus tierras. Todo lo contrario, cada vez hay más personas que se van y, a su vez, cada vez menos personas van a vivir a Venezuela. La situación es complicada y muchas personas deciden dejarlo todo, por su salud, por su ánimo y hasta por su vida.