Un hombre cuenta que tuvo que mudarse de Sanger a Fresno porque no tuvo más opción que salir de la habitación que rentaba. Afirma que, tras varios días de haberse instalado en el lugar, la arrendataria le pidió limpiar el baño un día por semana, lo que no representó un inconveniente para él. Sin embargo, asegura que, una mañana de miércoles, se levantó y fue al baño, pero lo encontró cerrado, por lo que tuvo que recurrir a otros métodos para hacer sus necesidades, como ir a una gasolinera.